jueves, 31 de mayo de 2012

"Los sueños de una sirena"


Convertida  en la única  bracista oaxaqueña en subir al pódium de la Olimpiada Nacional de Natación,  Dairi Cisneros Ortiz habla sobre la medalla obtenida, primera en su trayectoria deportiva.
“Estoy súper orgullosa, siento que valió la pena el esfuerzo que hice  meses atrás, agradezco a mis padres, a Acuarela y a mis entrenadores el apoyo  brindado”
La integrante del equipo Acuarela se ubicó en la tercera posición de los 800  libres en  la justa realizada en el Domo Acuático de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) en la ciudad de Monterrey, Nuevo León.
“El objetivo era mejorar mis tiempos, no creí estar lista para quedar entre las tres primeras, sin embargo lo conseguí y ahora me siento más segura”, confió la joven quien con el logro amplió sus posibilidades de conseguir un boleto rumbo a la Copa Challenger, en Canadá, la cual se convertiría en su segunda competencia internacional después del Campeonato Centroamericano y México de Natación al que asistió en 2010, en Guatemala.
“De acudir, sería una oportunidad para medirme con nadadoras de otros países y ver mi nivel,  saber en qué debo mejorar”, manifiesta al tiempo que invita a sus compañeros a “…echarle ganas si quieren sobresalir,  que se concentren porque aunque implica  sacrificios se puede lograr”.
Con 15 años de edad, 8 de los cuales tiene de practicar el deporte de las brazadas, Dairi reconoce: “La natación es muy importante en mi vida, me ha ayudado a ser disciplinada, sociable, fijarme metas y cumplirlas, ser una mejor persona” y agrega “…llegué a retirarme de la natación en dos ocasiones pero en las dos entendí que no podía dejarla y volví a los pocos días”.
De sus inicios, dijo: “Cuando era pequeña veía entrenar a los del equipo como Rodrigo Elorza, Mariane Johnson, Betsabe Vásquez  y me llamaba mucho la atención, fue lo que me motivó a querer entrar a las competencias”.
Como todo deportista, Dairi Cisneros quien cursa el segundo año de preparatoria en el Instituto Carlos Gracida de la ciudad de Oaxaca, sueña algún día asistir a unas Olimpiadas por lo que no descarta la posibilidad de emigrar en busca de apoyo para una mejor preparación.

martes, 15 de mayo de 2012

"Nunca es tarde..."


Cuando Luciano Tenorio decidió emprender la odisea de convertirse en triatleta lo hizo como una meta personal, ni siquiera imaginó que su primera competencia sería una fecha del circuito nacional con sede en Oaxaca, su casa.
Médico de profesión y deportista por afición, Tenorio Vasconcelos inició la aventura a los 40 años con el objetivo de modificar su estilo de vida que lo tenía al borde de la obesidad.
Tras siete meses de arduo entrenamiento, además de perder 12 kilos resolvió con su entrenador participar en la quinta fecha del serial mexicano de  triatlón 2012 celebrado en  Santa Cruz, Huatulco, en las costas del sureño estado de Oaxaca, de donde es oriundo.“Sabía que era un reto difícil ya que es la combinación de tres deportes y hay que dominarlos, de ellos lo que nunca antes practiqué  fue el atletismo porque me parecía aburrido, hoy sé que no es así” - reconoce y agrega: “…el triatlón me enseñó que en esta disciplina la competencia es con uno mismo, darse cuenta  lo que se es capaz de logar”.
Organizada por la Federación Mexicana de Triatlón y avalada por la Federación Internacional de la especialidad, la justa contó con la participación de deportistas de todo México y, al celebrarse en el mismo lugar un día después la Copa Mundial,  atletas de diferentes países también hicieron acto de presencia.
“Fue una experiencia inolvidable, todo el ambiente giraba en torno al triatlón, el día de mi competición estaba tan ansioso que lo único que me venía a la cabeza era saltar al agua”.Para el alumno de Acuarela el objetivo era terminar la carrera y lo hizo en un decoroso vigésimo octavo lugar de 37 competidores.
“Algunos más se quedaron en el camino por el golpe de calor o el agotamiento,  pero afortunadamente y gracias a mis entrenadores tanto  en agua como en tierra, a pesar de ser principiante todo el tiempo mantuve la mente fija en mi objetivo: la meta”
Y lo que para muchos triatletas es el ´talón de Aquilés´- la natación-  para Tenorio Vasconcelos fue el deporte que le dio la ventaja que a otros les faltó para llegar.“En Acuarela entendí que hay que aprender a combinar el espíritu con lo físico, es decir que es la mente la que le dice al cuerpo qué hacer y eso me llevo a nadar mi prueba en mar con mucha seguridad, a pesar de ser la primera vez que lo hacía”.
Ahora comparte su sentir respecto a iniciarse en la práctica deportiva: “A los jóvenes les diría que aprovechen su tiempo, que se fijen metas difíciles, que el ambiente deportivo también es excitante; a los adultos les invito a que no se den por vencidos, por difícil que parezca nunca es tarde para empezar, conseguir lo impensable y disfrutarlo”.